Semillas Feminizadas y Semillas Automáticas

Semillas Feminizadas

Las Semillas Feminizadas surgieron a finales de los años 90 como respuesta a la necesidad de cultivar semillas que garantizaran el desarrollo de plantas femeninas. Al principio este tipo de semillas producían plantas de cannabis con ciertos déficits de calidad y poco estables, que en ocasiones sufrían problemas de hermafroditismo. Sin embargo, con los años las semillas feminizadas han logrado unas altísimas cotas de calidad, tanto en producción, como en efectos o sabor, hasta el punto de haber relegado a las regulares a un escaso 10% de cuota de mercado.

Pros:

Coste-eficacia: La semillas de marihuana feminizadas garantizan cosechas 100% femeninas. Es decir, todos los esfuerzos y cuidados que inviertas en las plantas se verán recompensados porque no aparecerá un espécimen macho que tengas que desechar.

Contras:

Al no permitir el desarrollo de plantas machos, las semillas feminizadas no son la opción adecuada si tu objetivo es hacer semillas.

 

Semillas autoflorecientes

Conocidas como automáticas, tal como su nombre indica, florecen en un menor espacio de tiempo y requieren de menos cuidados que las regulares o las feminizadas. Las semillas de marihuana autoflorecientes surgieron como opción ideal para los cultivadores menos experimentados pero conforme han ido igualando sus parámetros de calidad, tanto en aromas y sabor como en efectos a los de sus primas no autoflorecientes, se han convertido en una alternativa válida para los growers más exigentes. Por si te surge la duda, sí, las semillas autoflorecientes también son feminizadas.

Pros:

Rapidez: Sin ninguna duda, la gran ventaja de las semillas autoflorecientes es la rapidez con la que se desarrollan. Los tiempos de floración cambian según la variedad, pero con cualquier automática sabes que en máximo dos meses y medio tus plantas estarán cosechadas.

Manejabilidad: Aunque las diferencias de calidad de las autoflorecientes comparadas con el resto de feminizadas cada día son menores, la mayor parte de las variedades automáticas desarrollan plantas de menor tamaño, que no sólo requieren un mantenimiento más sencillo, sino que son ideales para cultivos discretos, en balcones o terrazas. Si tu idea es tener una planta de marihuana manejable, camuflada entre las flores y macetas de tu terraza, las autoflorecientes son, sin duda, tu opción.

Facilidad: Las semillas autoflorecientes son, en general, más sencillas para cultivar, tanto en interior como en exterior. En cultivos de interior no requieren cambiar el fotoperiodo ya que son las propias plantas quienes pasan de crecimiento a floración solas. Es decir, independientemente de las horas de luz que reciban, desarrollarán cogollos.

Contras:

Producción: Al tener un menor tamaño, las semillas de cannabis autoflorecientes tienen el inconveniente de dar una menor producción por planta.

 

referencias

https://www.dinafem.org/es/blog/semillas-cultivo-regulares-feminizadas-autoflorecientes-cbd/